David y Goliat
Author: Admin // Category: Frases Motivacionales, Ley de la Atracción, Superación Personal“Ser desafiado en la vida es inevitable, ser derrotado es opcional.” ~ Roger Crawford
En la historia de David y Goliat registrada en la Biblia, encontramos que todo el pueblo de Israel tenía mucho miedo de Goliat.
“Todos los hombres de Israel, al ver a aquel hombre, se fueron huyendo a causa de él, y tenían muchísimo miedo.” ~ 1 Samuel 17: 24
En otras palabras, habían aceptado la derrota pues aceptaron el miedo en sus mentes aún antes de enfrentarse a aquel gigante. Por el contrario, David tenía mucha fe y había visualizado la victoria en su mente.
“David respondió a Saúl: —Tu siervo ha sido pastor de las ovejas de su padre. Y cuando venía un león o un oso y tomaba alguna oveja del rebaño, yo salía tras él, lo hería y la rescataba de su boca. Si se levantaba contra mí, yo lo agarraba por la melena, lo hería y lo mataba. Fuese león o fuese oso, tu siervo lo mataba. Ese filisteo incircunciso será como uno de ellos, porque ha desafiado a los escuadrones del Dios viviente.” ~ 1 Samuel 17: 34 – 36
“Y David añadió: ¡Jehová, quien me ha librado de las garras del león y de las garras del oso, él me librará de la mano de ese filisteo!” ~ 1 Samuel 17: 37a
En esta historia, las desventajas que tenía David era varias, aparte del tamaño físico y juventud, Goliat era un guerrero consumado con basta experiencia en batallas, mientras que David era un pacífico pastor de ovejas. Sin embargo, todo eso no evitó que David ganara. El relato bíblico continúa:
“Saúl vistió a David con su propia armadura. Le puso un casco de bronce sobre su cabeza y lo vistió con una cota de malla.
Luego David se ciñó la espada de él sobre su ropa e intentó andar, porque no estaba acostumbrado. Entonces David dijo a Saúl: —Yo no puedo andar con esto, porque no estoy acostumbrado. David se quitó de encima aquellas cosas.
Entonces tomó su cayado en su mano y escogió cinco piedras lisas del arroyo, y las puso en la bolsa pastoril, en el zurrón que llevaba. Y con su honda en su mano, se fue hacia el filisteo.
El filisteo venía acercándose a David, precedido de su escudero.
Cuando el filisteo miró y vio a David, lo tuvo en poco, porque era un joven de tez sonrosada y de hermoso semblante.
Y el filisteo preguntó a David: —¿Acaso soy yo un perro para que vengas contra mí con palos? El filisteo maldijo a David por sus dioses.
También el filisteo dijo a David: —¡Ven a mí, y daré tu carne a las aves del cielo y a los animales del campo!
Entonces David dijo al filisteo: —Tú vienes contra mí con espada, lanza y jabalina. Pero yo voy contra ti en el nombre de Jehová de los Ejércitos, Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has desafiado.
Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré. Te cortaré la cabeza y daré hoy los cadáveres del ejército filisteo a las aves del cielo y a los animales del campo. ¡Y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel!
También todos estos congregados sabrán que Jehová no libra con espada ni con lanza. ¡De Jehová es la batalla! ¡Y él os entregará en nuestra mano!
Aconteció que cuando el filisteo se levantó y se fue acercando al encuentro de David, éste se dio prisa y corrió al combate contra el filisteo.
Entonces David metió su mano en la bolsa, tomó de allí una piedra y la arrojó con la honda, hiriendo al filisteo en la frente. La piedra quedó clavada en su frente, y éste cayó de bruces en tierra.
Así venció David al filisteo con una honda y una piedra, y lo mató sin tener espada en su mano.
Entonces David corrió, se puso sobre el filisteo, y tomando la espada de éste, la sacó de su vaina y lo mató cortándole la cabeza con ella. Cuando los filisteos vieron muerto a su héroe, huyeron. ” ~ 1 Samuel 17: 38 – 51
A lo largo de tu vida, puede que te enfrentes a muchos desafíos. ¿Cómo vas a actuar frente a ellos? ¿Vas a tener miedo? O ¿vas a tener fe y a visualizar que sales ganando?