“Creo que el “debería” es una de las palabras más dañinas en nuestro lenguaje. Cada vez que usamos “debería”, estamos, en efecto, diciendo “malo”. Estamos mal o estuvimos mal o vamos a estar mal. No creo que necesitemos más cosas negativas en nuestra vida. Necesitamos tener más libertad de elección. Me gustaría tomar la palabra “debería” y removerla del vocabulario para siempre. Yo la reemplazaría por la palabra “podría”. Podría nos da una alternativa a escoger, y nunca estaremos mal.” ~ Louise Hay en “Usted Puede Sanar su Vida”
En serio, esta es una de las grandes ideas de todos los tiempos.
Debería, debería, debería, debería.
Tony Robbins dice: “Quita el debería de todo tu ser!!!!”
Así que, uh, ¿está él “debería” en todo tu ser?
Bueno, detente! Ya estas apestando el lugar. 🙂
Piénsalo, seriamente.
Trata de jugar este juego contigo mismo. Ve si puedes comenzar a notar cada vez que usas la palabra “debería”. Y luego intercámbiala por “podría” y siente la diferencia entre las dos. “Debería” es una palabra que te lleva para abajo. SIEMPRE. “Podría”, como dice Louise, ofrece una alternativa. En esa libertad de elección está nuestro poder.
Louise ofrece este ejercicio en su libro. Completa 5 frases que empiecen con: “Yo debería”.
1) Yo debería_____________________________ ________________________
2) Yo debería______________________________________________________
3) Yo debería______________________________________________________
4) Yo debería_____________________________________________________
5) Yo debería______________________________________________________
Bueno. Ahora, lee cada una y pregúntate ¿Por qué?
Ahora, toma esas 5 oraciones y empiézalas con:
“Si realmente quisiera yo podría _____________________________.
¿Sientes el gran cambio de energía, eh? Estás básicamente cambiando del crítico “debería” sin poder, al poderoso y expansivo “podría”.
Este es un cambio que queremos hacer seguido.
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